El reconocimiento facial se va consolidando como una de las peripecias tecnológicas que más ámbitos va a abarcar en los próximos años. Todo tipo de compañías apuestan día a día por el uso de esta tecnología, con el fin de mejorar la experiencia de usuario
El reconocimiento facial y sus avances tecnológicos iniciaron en los años 60. En aquel momento como patrones para las plantillas se usaba la distancia entre los ojos, orejas, nariz y boca. Hoy el reconocimiento facial ha evolucionado tanto, que funciona incluso con rostros parcialmente cubiertos como gafas, barba, peinados y lentes. Al igual que la realidad aumentada, esta tecnología evoluciona constantemente a pasos de gigante, tanto así, que actualmente se usa de diferentes maneras alrededor del mundo. Ver más: La realidad aumentada ¡qué fascinante desborde de imaginación!