Cuando una PYME decide abrirse al exterior mediante un proceso de internacionalización de sus productos o servicios no solo tienen la opción de exportar o de invertir directamente en el exterior desplazando sus fábricas o centros de producción. Existe una tercera alternativa: las licencias de distribución.
Las licencias son acuerdos contractuales entre empresas de distintos países, lo que implica la explotación conjunta o la cesión de la ventaja específica del negocio a otra entidad empresarial ya establecida en el mercado objetivo.