Imagina estar en el trabajo y que tu jefe te diga, que te animes y que eches una pachanga en el futbolín o que te sugiera jugar con un videojuego inspirado en el famoso “FarmVille”. El primer pensamiento que te puede venir a la cabeza es: ¿Y qué clase de empresa hace esto? Pues bien, esto se debe a la gamificación, que ha despertado el interés en el mundo laboral, un término que mezcla marketing, juegos y psicología para crear experiencias que involucran al empleado para así mejorar posibles problemas de motivación, de falta de esfuerzo o productividad.